Si pudiera, me iría de acá sin dudarlo. Pero tengo 31 años, tengo acá a mi familia, la familia de mi señora, todo. Irme sería darles la espalda y dejarlos morir solos en este pozo, y no creo que pueda.
Me da bronca porque no tengo la mínima esperanza de ver un país normal. No tengo aspiraciones de millonario, quiero trabajar, disfrutar de mi familia, ahorrar, cambiar el auto, la casa, irme de vacaciones, vivir sin miedo a que te caguen afanando y/o matando.
Y quedarse acá es quedarse a sobrevivir, a romperte el lomo toda tu vida adulta y que te alcance para la comida y algún gastito, atar todo con alambre, no enfermarte nunca y cuando uno llegue a viejo, rezar para sobrevivir con una jubilación miserable y Pami. Si tenés hijos, es saber que van a crecer en un país de mierda y van a tener que hacer el mismo esfuerzo que su padre, pero les va a costar el doble.
Si alguien es muy exitoso como para que le vaya bien, le van a romper el culo y a exprimirlo como una naranja en pos de la justicia social y la sarasa.
La única manera de pasarla más o menos bien acá es tener un buen laburo en gobierno, o en poder judicial, esos tongos generalmente bien pagos, con todos los beneficios laborales posibles, etc., pero esos cargos se heredan o se militan; si no sos del palo...a sufrirla en la actividad privada.
Y no es un problema de votar bien solamente, al menos el 80% del país está de acuerdo con el status quo y conspira permanentemente con cualquier aspiración de cambio real.
La plandemia en curso sacó a la luz lo peor del botonismo de la sociedad, me di cuenta de que hay muchísima gente que por plata es capaz de matarte si alguien se lo ordena. Esa gente, en las redes son todos solidarios, pero por ejemplo no les calienta hacerte esperar 7 horas haciendo fila bajo la lluvia porque "se cayó el sistema", no les importa hacerte perder tiempo, no les importa que a un padre se esté muriendo su hija y no pueda despedirla, no les importa que vos te jodas, en lo absoluto, no les calienta nada de nada más que su culo y su cargo. Y es imposible convivir en un país plagado de gente así.