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Suplente
Estaba leyendo Pagina y vi una nota interesante sobre la gestion actual de Boca. La nota pertenece a Gustavo Viega, uno de los mas destacados y respetables periodistas deportivos.
cita:CAMBIOS SUSTANCIALES EN LA GESTION DE BOCA DE LA ERA POST MACRI
Por Amor a Boca y a Bianchi
Mayor transparencia en las negociaciones, designacion de gente idonea y honesta en cargos importantes, di logo con los dirigentes cr¡ticos. El club que asoma tras el largo reinado del jefe de Gobierno porteño y sus delfines.
Por Gustavo Veiga
En Boca puede que no se altere la continuidad de los ‚xitos deportivos, pero s¡ cambio el estilo para hacer ciertos negocios y manejar el poder. Desde que Mauricio Macri perdio influencia en sus asuntos internos, primero Pedro Pompilio y ahora Jorge Amor Ameal tomaron distancia del jefe de Gobierno porteño y construyeron su propia base de sustentacion. El actual presidente delego en Carlos Bianchi el manejo del fútbol y aunque acordo pagarle 1.700.000 dolares por año, termino as¡ con algunos negociados que eran frecuentes durante los tres mandatos del ingeniero (1995-2007). Por eso, el ex t‚cnico y actual manager es cuestionado porque cobra un sueldo "car¡simo", el dirigente que lo contrato es acusado de haber "triplicado el d‚ficit" y el club ingreso en un per¡odo de turbulencia interna que las buenas campañas, por el momento, disimulan.
Roberto Digon, opositor y candidato derrotado en las últimas elecciones a mediados del año pasado, sostiene que la actual gestion "es mucho mejor que las de Macri y Pompilio". Adem s, Bianchi no esquiva el contacto con referentes de la oposicion y se interesa por dialogar con ellos. Durante los doce años de hegemon¡a macrista suced¡a lo contrario: la pol¡tica oficial consist¡a en rechazar todo tipo de contacto con los cr¡ticos y se los intentaba amedrentar mediante el env¡o de cartas documento. "Por intermedio de un amigo en común, me llego la informacion de que Bianchi quiere hablar conmigo", le dijo a P gina/12 un antiguo adversario del ex presidente. No es Digon, con quien el Virrey siempre ha tenido un trato frecuente. Y ese gesto habla de cierta apertura.
En los pasillos de la Bombonera y m s all de su per¡metro, se repite una frase con insistencia: "Bianchi corto las transas que hab¡a". Para ejemplificarlo, quienes le atribuyen esta conducta beat¡fica al manager, dicen que en la operacion de Jesús D tolo al Napoli de Italia no dio margen a que se entrometieran intermediarios. El entrenador viajo a Italia acompañado por dos gerentes del club, cerro la operacion en 8.300.000 dolares por el 80 por ciento del pase y volvio con la sensacion del deber cumplido.
Una de las primeras decisiones que adopto Bianchi apenas asumio en enero fue sugerirle a Ameal que Jos‚ Malleo deb¡a ser el director general de Fútbol Amateur. Antes hab¡a desplazado a Andr‚s Lillini, un t‚cnico que hab¡a llegado a Boca a comienzos del 2007 procedente de las divisiones inferiores del Morelia mexicano. "Jos‚ es un tipo honesto", dijo alguien que lo conoce muy bien, dando a entender que con ‚l no habr fuga de talentos.
En su primer viaje a Europa como manager, Bianchi, quien solo hab¡a cumplido un papel similar en el club franc‚s Par¡s Saint Germain, tambi‚n consiguio poner en caja una deuda que manten¡a el Real Madrid con Boca por la transferencia de Fernando Gago. Esta ejecutividad que mostro el Virrey para ordenar las cuentas del fútbol no moderaron en nada las cr¡ticas de Macri, quien dijo que a ‚l le tendr¡an que haber cortado las dos manos para firmar el contrato en dolares por tres años que avalo Ameal con el DT. Como contrapartida, Digon, quien defiende el regreso de Bianchi explico: "Carlos est en todos los detalles, controla los convenios, se ocupa hasta de los padres de los jugadores juveniles".
La conduccion de Boca tambi‚n tomo otras medidas importantes como despedir a varios gerentes, al intendente del club, Omar Toti y al comisario de confianza de Macri que estaba a cargo de la seguridad, Pedro Santa Eugenia. Tambi‚n corto el gasto que significaba -a cargo de Boca- la custodia de un encumbrado dirigente y toda su familia. Esta austeridad que pretende demostrar Ameal no ha sido bien recibida en el caso del b squetbol profesional, al que pretende dar de baja por deficitario. Banderas de protesta por esta posible medida colgaban durante el último partido de la Liga Nacional en la Bombonerita pidiendo para que no cierre la actividad.
Pablo Abbat ngelo, tan cr¡tico de Macri como ahora de Ameal, sostiene que "esta comision directiva tiene responsabilidad en la situacion economico-financiera del club por inaccion u omision. Apoyo todos los presupuestos y balances durante los gobiernos anteriores y ahora la bomba les va estallar en sus manos".
El principal conflicto que afrontan Ameal y Bianchi sucedio con el arquero Mauricio Caranta, aprovechado por un dirigente despechado como Juan Carlos Crespi, el vicepresidente 3, quien alego su condicion de gremialista del SUPE para defender al futbolista marginado: "Soy parte del movimiento obrero y no puedo permitir esto", dijo el acaudalado dirigente. No se recuerda una frase semejante de Carozo Crespi cuando YPF fue vendida a la española Repsol en plena org¡a privatizadora, pero s¡ ahora evoco su condicion de sindicalista despu‚s de quedar desplazado tras la llegada de Bianchi. Como fuere, el caso Caranta se manejo muy mal.
Cada una de estas jugadas de Ameal, un ex militante peronista de Berazategui que amaso su poder en Boca con el respaldo de las peñas del interior, tienen la audacia de alguien que no parece temer a los conflictos, ni a la envergadura de sus adversarios. Es cierto que se apoyo en Bianchi para tomar distancia de Macri. Y esa movida, por ahora, le da cierto ox¡geno para seguir gobernando sin grandes tropiezos. Lo dem s corre por cuenta de los resultados que se obtengan adentro de la cancha.