Juan Xeneize
Juvenil
"Ischia sigue subido a su soberbia"
Mientras mira la Copa (y todo) por TV, Mauricio se entrena solo y critica al t‚cnico, que le hizo la cruz en Boca: "El es el responsable de que hoy yo no tenga equipo". Charla a fondo con el arquero.
Los arqueros forman una casta especial dentro de la raza futbolera. Sobre todo, los que integran la era post Chilavert, por lo general tipos de temperamento fuerte. Mauricio Caranta est medio loco... Loco por volver a atajar. Aunque, en realidad, desde que dejo de formar parte del plantel de Boca no paro de entrenarse.
"¿Hace falta que explique todo de nuevo?", plantea antes de iniciar el mano a mano con Ol‚. Nunca fue amante de los reportajes con fotos, pero accede. Se lo nota tranquilo y acepta el desaf¡o de contar los porqu‚ de su salida de Boca. O, por lo menos, su version de los hechos. Se acomoda en la silla del restaurante pautado para el encuentro, revuelve el caf‚ y arranca...
--¿Por qu‚ est s afuera de Boca?
--Por lo que sabe la gente. No es una tontera... Fueron cosas que se malinterpretaron del lado de Ischia y de mi lado y que nunca se pudieron resolver. Ninguno tuvo la intencion de juntarse y aclarar todo. Se rompieron los codigos y empezaron los rumores. Con una charla se solucionaba... Pero se desencadeno todo y ac estoy: sin club y entren ndome solo.
--¿Nunca m s charlaste con Ischia?
--Jam s... Despu‚s de Godoy Cruz, hablamos mano a mano de mi tema personal, del problema de mi hija mayor. Llegamos a un acuerdo de que no era conveniente que atajara contra Estudiantes. Despu‚s tuve una charla un martes por la mañana. Porque en una reunion del lunes, con el presidente y otros dirigentes, no se quiso hacer presente. Por eso me atendio en otro lugar, fuera del club. Yo le ped¡ disculpas al plantel por si mi decision lo hab¡a perjudicado y ah¡ Carlos ratifico lo que hab¡a dicho: que yo iba a volver a jugar cuando ‚l quisiera.
--¿Pero te peleaste con Ischia? ¿Fue por cuestiones deportivas o te llevabas mal con Riquelme?
--Primero, si tuviese problemas con un compañero, no usar¡a los medios para que se supiera. Si tuve problemas con algún jugador, y no hablo solo de Rom n, intent‚ solucionarlo adentro y nadie se entero. Segundo, no creo que haya habido cuestiones deportivas. Y en lo personal, se dijeron muchas mentiras y no voy a salir a desmentir cosas que no existieron.
--¿Habl s de cosas de tu vida privada?
--S¡... Si la intencion de los que tiraron esos rumores era perjudicarme a m¡ y a mi familia, lo lograron. En Boca est s expuesto a esas cosas. Pero no me reprocho nada. Esto no mancha lo bueno que logr‚ en el club: la Libertadores, la Recopa y el torneo local.
--Insisto, ¿cu l fue el quiebre en tu relacion con Ischia?
--El problema fue cuando, entre cuatro paredes, le ped¡ no jugar por el problema de mi hija mayor, que nadie lo quiere creer... Pero fue as¡. Despu‚s, dije que no preguntaba cuando me pon¡an y tampoco cuando me sacaban. Y ‚l no s‚ qu‚ interpreto. Lo que s¡ creo es que hubo un mal manejo de la situacion. Se le fue de las manos. Me podr¡a haber consultado. Porque hab¡a tiempo. Tal vez no ten¡a la intencion de tratar de solucionarlo. No estoy en su cabeza. De ah¡, ni un bien ni un mal.
--¿Ischia te fallo?
--No s‚... El tendr su punto de vista. No comparto la forma en que se manejo. Cuando llego a Boca dijo "muchachos, ‚ste es el plantel" y hab¡a cuatro jugadores a los que les dijo "no los voy a tener en cuenta" pero que, si quer¡an, siguieran trabajando. Yo esperaba esas palabras el d¡a que me present‚ y me negaron la ropa.
--¿Te sentiste respaldado por tus compañeros?
--Es una situacion dif¡cil. No es un problema de jugador a jugador. Yo podr¡a haberle puesto el plantel en contra, o hablar mal de Carlos, de su trabajo. Jam s lo hice. Me dijo que volver¡a a jugar cuando ‚l lo decidiera. Y as¡ fue... Nunca. Para ‚l no era útil en el equipo. Pero segu¡ trabajando a sus ordenes. Cuando ten¡a que ir un domingo, iba. Cuando hab¡a partido de Copa un mi‚rcoles, me entrenaba de lunes a lunes sin descanso. Jam s protest‚, ni le ped¡ un d¡a, no falt‚, no llegu‚ tarde...
--¿No te fue de frente?
--Creo que no. Era una simple charla. "Mir , Mauricio, no te quiero m s en el plantel". Como lo hizo público... A m¡ no se me terminaba la carrera. Buscaba otro club y ya estar¡a trabajando. En algunos puntos no se manejo de la mejor forma y es responsable de que yo no tenga equipo. Ac no hay presidente, ni director deportivo. La decision la tomo uno solo. No me parece que un t‚cnico mande en un club. Somos todos empleados: est el presidente y todos los dem s abajo.
--¿Intentaste solucionar el problema?
--S¡, no quer¡a irme de Boca. No sab¡a lo que iba a pasar el 12 de enero (cuando arranco la pretemporada), pero lo intu¡a... Desde el primer d¡a, cuando habl‚ con Bianchi, se busco la forma de llegar a un acuerdo. Hasta ofrecimos plata para desvincularme. Y nada... Despu‚s, el gremio nos dio una mano grande. A Boca se le dio todos los medios para arreglar todo. Antes de ir a Tandil, habl‚ por tel‚fono con el presidente para no llegar a la puerta del hotel... Y me dijo que era inevitable.
--¿Y qu‚ te dijeron?
--Lo que dijeron en los medios: que ya estaba, que hab¡a una oferta... Estiraron los tiempos. Y no s‚ qu‚ pensar, si lo hac¡an para preservar el patrimonio del club o para perjudicarme en lo deportivo. Boca me acorralo para que siguiera los pasos legales.
--¿Escuchaste cuando Ischia dijo que uno solo hab¡a pedido no jugar y ya no estaba en el club?
--S¡. Lo único que hace es seguir subido al caballo de la soberbia. Y demuestra que sigue siendo un capricho lo que pasó conmigo.
--¿Estuviste muy mal?
--La verdad que s¡. No tanto por lo deportivo. Esto afecta mi carrera porque hac¡a mucho tiempo que ven¡a siendo titular y solo sal¡a por lesiones. Pero m s me afecto en mi vida personal. Se hablo de mi intimidad, tengo mi vida con mi señora y mis tres hijas. Pero estoy trabajando, hay que seguir pele ndola.
--¿Como manejaste el tema con tu familia?
--No tuve que aclarar nada, porque saben qui‚n soy. Y no existio la pregunta "¿qu‚ pasó?". Fue duro encender el televisor y que hablen de m¡ en los programas de chimentos. Eso a mi familia la afecto. Ahora lo m s duro es trabajar solo, sin un grupo. Lo que viv¡ en Boca no lo viv¡ en ningún lado y mi balance es positivo, m s all de lo que pasó.
--¿Todo esto es porque el DT te pasó una factura por no jugar?
--S¡. Hay otras explicaciones. Pero en la ultima conferencia, fue el propio Ischia el que lo dijo.
--¿Sent¡s que te equivocaste en algo?
--No. No me arrepiento. Mi hija ten¡a un problema y eso estaba por encima de todo. Que despu‚s nos equivocamos los dos, seguro. Y no digo que no tenga que pedir perdon. Cuando me equivoco, levanto la mano y lo reconozco. Yo no quiero que me pidan perdon. Pero s¡ que digan "me equivoqu‚". Nada m s.
--¿Te sentar¡as con Ischia a tomar un caf‚?
--No soy rencoroso y lo que pasó no es f cil. Y no es lindo, no se lo deseo a nadie. Hoy no s‚ si me sentar¡a. Tampoco creo que ‚l tenga la intencion de hacerlo.
Ol‚
Mientras mira la Copa (y todo) por TV, Mauricio se entrena solo y critica al t‚cnico, que le hizo la cruz en Boca: "El es el responsable de que hoy yo no tenga equipo". Charla a fondo con el arquero.
Los arqueros forman una casta especial dentro de la raza futbolera. Sobre todo, los que integran la era post Chilavert, por lo general tipos de temperamento fuerte. Mauricio Caranta est medio loco... Loco por volver a atajar. Aunque, en realidad, desde que dejo de formar parte del plantel de Boca no paro de entrenarse.
"¿Hace falta que explique todo de nuevo?", plantea antes de iniciar el mano a mano con Ol‚. Nunca fue amante de los reportajes con fotos, pero accede. Se lo nota tranquilo y acepta el desaf¡o de contar los porqu‚ de su salida de Boca. O, por lo menos, su version de los hechos. Se acomoda en la silla del restaurante pautado para el encuentro, revuelve el caf‚ y arranca...
--¿Por qu‚ est s afuera de Boca?
--Por lo que sabe la gente. No es una tontera... Fueron cosas que se malinterpretaron del lado de Ischia y de mi lado y que nunca se pudieron resolver. Ninguno tuvo la intencion de juntarse y aclarar todo. Se rompieron los codigos y empezaron los rumores. Con una charla se solucionaba... Pero se desencadeno todo y ac estoy: sin club y entren ndome solo.
--¿Nunca m s charlaste con Ischia?
--Jam s... Despu‚s de Godoy Cruz, hablamos mano a mano de mi tema personal, del problema de mi hija mayor. Llegamos a un acuerdo de que no era conveniente que atajara contra Estudiantes. Despu‚s tuve una charla un martes por la mañana. Porque en una reunion del lunes, con el presidente y otros dirigentes, no se quiso hacer presente. Por eso me atendio en otro lugar, fuera del club. Yo le ped¡ disculpas al plantel por si mi decision lo hab¡a perjudicado y ah¡ Carlos ratifico lo que hab¡a dicho: que yo iba a volver a jugar cuando ‚l quisiera.
--¿Pero te peleaste con Ischia? ¿Fue por cuestiones deportivas o te llevabas mal con Riquelme?
--Primero, si tuviese problemas con un compañero, no usar¡a los medios para que se supiera. Si tuve problemas con algún jugador, y no hablo solo de Rom n, intent‚ solucionarlo adentro y nadie se entero. Segundo, no creo que haya habido cuestiones deportivas. Y en lo personal, se dijeron muchas mentiras y no voy a salir a desmentir cosas que no existieron.
--¿Habl s de cosas de tu vida privada?
--S¡... Si la intencion de los que tiraron esos rumores era perjudicarme a m¡ y a mi familia, lo lograron. En Boca est s expuesto a esas cosas. Pero no me reprocho nada. Esto no mancha lo bueno que logr‚ en el club: la Libertadores, la Recopa y el torneo local.
--Insisto, ¿cu l fue el quiebre en tu relacion con Ischia?
--El problema fue cuando, entre cuatro paredes, le ped¡ no jugar por el problema de mi hija mayor, que nadie lo quiere creer... Pero fue as¡. Despu‚s, dije que no preguntaba cuando me pon¡an y tampoco cuando me sacaban. Y ‚l no s‚ qu‚ interpreto. Lo que s¡ creo es que hubo un mal manejo de la situacion. Se le fue de las manos. Me podr¡a haber consultado. Porque hab¡a tiempo. Tal vez no ten¡a la intencion de tratar de solucionarlo. No estoy en su cabeza. De ah¡, ni un bien ni un mal.
--¿Ischia te fallo?
--No s‚... El tendr su punto de vista. No comparto la forma en que se manejo. Cuando llego a Boca dijo "muchachos, ‚ste es el plantel" y hab¡a cuatro jugadores a los que les dijo "no los voy a tener en cuenta" pero que, si quer¡an, siguieran trabajando. Yo esperaba esas palabras el d¡a que me present‚ y me negaron la ropa.
--¿Te sentiste respaldado por tus compañeros?
--Es una situacion dif¡cil. No es un problema de jugador a jugador. Yo podr¡a haberle puesto el plantel en contra, o hablar mal de Carlos, de su trabajo. Jam s lo hice. Me dijo que volver¡a a jugar cuando ‚l lo decidiera. Y as¡ fue... Nunca. Para ‚l no era útil en el equipo. Pero segu¡ trabajando a sus ordenes. Cuando ten¡a que ir un domingo, iba. Cuando hab¡a partido de Copa un mi‚rcoles, me entrenaba de lunes a lunes sin descanso. Jam s protest‚, ni le ped¡ un d¡a, no falt‚, no llegu‚ tarde...
--¿No te fue de frente?
--Creo que no. Era una simple charla. "Mir , Mauricio, no te quiero m s en el plantel". Como lo hizo público... A m¡ no se me terminaba la carrera. Buscaba otro club y ya estar¡a trabajando. En algunos puntos no se manejo de la mejor forma y es responsable de que yo no tenga equipo. Ac no hay presidente, ni director deportivo. La decision la tomo uno solo. No me parece que un t‚cnico mande en un club. Somos todos empleados: est el presidente y todos los dem s abajo.
--¿Intentaste solucionar el problema?
--S¡, no quer¡a irme de Boca. No sab¡a lo que iba a pasar el 12 de enero (cuando arranco la pretemporada), pero lo intu¡a... Desde el primer d¡a, cuando habl‚ con Bianchi, se busco la forma de llegar a un acuerdo. Hasta ofrecimos plata para desvincularme. Y nada... Despu‚s, el gremio nos dio una mano grande. A Boca se le dio todos los medios para arreglar todo. Antes de ir a Tandil, habl‚ por tel‚fono con el presidente para no llegar a la puerta del hotel... Y me dijo que era inevitable.
--¿Y qu‚ te dijeron?
--Lo que dijeron en los medios: que ya estaba, que hab¡a una oferta... Estiraron los tiempos. Y no s‚ qu‚ pensar, si lo hac¡an para preservar el patrimonio del club o para perjudicarme en lo deportivo. Boca me acorralo para que siguiera los pasos legales.
--¿Escuchaste cuando Ischia dijo que uno solo hab¡a pedido no jugar y ya no estaba en el club?
--S¡. Lo único que hace es seguir subido al caballo de la soberbia. Y demuestra que sigue siendo un capricho lo que pasó conmigo.
--¿Estuviste muy mal?
--La verdad que s¡. No tanto por lo deportivo. Esto afecta mi carrera porque hac¡a mucho tiempo que ven¡a siendo titular y solo sal¡a por lesiones. Pero m s me afecto en mi vida personal. Se hablo de mi intimidad, tengo mi vida con mi señora y mis tres hijas. Pero estoy trabajando, hay que seguir pele ndola.
--¿Como manejaste el tema con tu familia?
--No tuve que aclarar nada, porque saben qui‚n soy. Y no existio la pregunta "¿qu‚ pasó?". Fue duro encender el televisor y que hablen de m¡ en los programas de chimentos. Eso a mi familia la afecto. Ahora lo m s duro es trabajar solo, sin un grupo. Lo que viv¡ en Boca no lo viv¡ en ningún lado y mi balance es positivo, m s all de lo que pasó.
--¿Todo esto es porque el DT te pasó una factura por no jugar?
--S¡. Hay otras explicaciones. Pero en la ultima conferencia, fue el propio Ischia el que lo dijo.
--¿Sent¡s que te equivocaste en algo?
--No. No me arrepiento. Mi hija ten¡a un problema y eso estaba por encima de todo. Que despu‚s nos equivocamos los dos, seguro. Y no digo que no tenga que pedir perdon. Cuando me equivoco, levanto la mano y lo reconozco. Yo no quiero que me pidan perdon. Pero s¡ que digan "me equivoqu‚". Nada m s.
--¿Te sentar¡as con Ischia a tomar un caf‚?
--No soy rencoroso y lo que pasó no es f cil. Y no es lindo, no se lo deseo a nadie. Hoy no s‚ si me sentar¡a. Tampoco creo que ‚l tenga la intencion de hacerlo.
Ol‚