Caranta no tiene la fortaleza mental que requiere el inmenso arco de Boca.
Y el fútbol es un estado de nimo.
En el Boca 2-2 Atlas, entro al vestuario, empezo a pegarle a las paredes y puteo a Maidana y a Monzon.
Al otro d¡a le inventaron un desgarro y no jugo ni un partido m s de esa Copa, lamentablemente.
Que haya pedido no jugar no deber¡a llamar la atencion.
Le hab¡an hecho 7 goles en los últimos 2 partidos!
El problema es que con su auto-exclusion se hizo cargo de errores que no fueron suyos.
Caranta no vuelve a atajar en Boca, salvo que se suceda un milagro psicologico.
Es un buen arquero, pero hoy Javi Garc¡a tiene ese equilibrio necesario entre personalidad y t‚cnica.
Caranta, Migliore y Bobadilla: inseguridad, errores y salida traum tica.
Una l stima...