20 años de la muerte de Federico Moura

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20 años de la muerte de Federico Moura

http://www.pagina12.com.ar/diario/suplementos/soy/1-493-2008-12-19.html

No es solo rock and roll

Hermoso, elegante, ambiguo, sarc stico, vanguardista; Federico Moura fue todo eso y m s: una estrella de rock que se maquillaba para salir a escena; un frontman capaz de poner al público a bailar cuando el resto de las bandas se plegaban al patrioterismo vacuo de la dictadura; un rebelde que se re¡a cuando pretend¡an insultarlo llam ndolo puto pero que dejo en las letras de sus canciones esos guiños complices con la comunidad gay. El hombre que cumplio con la tr gica paradoja de haber bautizado a su hija art¡stica -la banda de rock que cambiar¡a la escena local en los años '80- como Virus, para años despu‚s convertirse en la primera persona pública que murio a causa del virus del sida. A 20 años de su último acto, un recorrido emocionado por aquella superficie de placer que fueron su vida y su obra.
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La figura de Federico Moura tendr  por siempre los elementos caracter¡sticos de una estrella de rock. Hermoso, ambiguo, ironico, influencia innegable del llamado rock nacional, y por supuesto una muerte tr gica que tambi‚n es paradigma de la historia: la primera persona pública que muere de sida en Argentina. Todos elementos que juntos y perfectamente entrelazados hacen pensar m s en una pel¡cula que en algo que ocurrio de verdad. A 20 años de su muerte el legado de Federico no solo es importante en cuanto a las innovaciones en el plano musical, sino tambi‚n porque su figura se ha convertido en uno de los primeros iconos gays de importancia fundacional.

As¡ como la ciudad cuadrada que los vio nacer est  atravesada por numerosas diagonales, la historia de Virus atraviesa d‚cadas que marcaron al pa¡s y al mundo: dictadura, rock, desaparecidos, pop, la guerra de Malvinas, arte, homofobia, libertad, prejuicios, desprejuicios, discriminacion y sida.

La aparicion de este grupo dentro de la escena del rock nacional provoco toda una revolucion. Nunca antes en la música vern cula se hab¡an escuchado sonidos como los de la banda (con influencias de b sicos pop como B52's o Devo): se trataba de la primera banda moderna que sintonizaba el mismo canal de lo que estaba sucediendo fuera de la Argentina. Eran adem s los primeros en introducir el humor en el rock: se re¡an de s¡ mismos y del discurso del rockero. "Virus introduce la posibilidad de que el rockero no se tome en serio, no en esa situacion de 'rockero que se r¡e de s¡ mismo', sino que sal¡a naturalmente, porque parec¡a que ten¡as que tener una cancion pelotuda para re¡rte de vos mismo. Para m¡ es fundacional: cambio la manera de hacer rock", dice Oscar Jalil, periodista e ideologo de Tomo lo que encuentro. 19 versiones de Virus (2004), un disco donde bandas platenses grabaron versiones propias de canciones del grupo que los marco. Fueron los primeros en llegar a las discotecas. Virus se pod¡a bailar. Pero por sobre todo ninguna banda presentaba la est‚tica ambigua de un frontman que no dudaba en jugar con la sexualidad desde sus letras, sus movimientos y su aspecto. Virus pon¡a en evidencia el sexo del rock: el rock era macho... y homofobico. El ambiente del rock, en algún punto conservador, se vio sacudido de pronto por estos pibes de pelo corto, maquillados y con ropas extrañas. Ante la incomprension de lo que ve¡an, los rockers atacaron: son todos pvtos, dec¡an.

El rock no estaba acostumbrado a estas canciones donde hab¡a cierta autoflagelacion pero que a su vez manejaban la elegancia: eso era algo de Federico, algo que hab¡a en su forma de cantar, en su forma de moverse: una forma teatral, nerviosa, y una diccion muy marcada, exagerada. La relacion del público con Virus y en particular con Federico, era de amor-odio: la gente los quer¡a o los rechazaba con mucha fuerza. A la cl sica dicotom¡a rockera duros-blandos, fr¡volos-de verdad se le agregaba esta arista sexual en la cual t citamente se un¡a a la debilidad y a la supuesta falta de contenido (el no cantar sobre cosas "serias y comprometidas") con la cuestion gay.
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El aspecto y el despliegue esc‚nico de Federico provocaba prejuicios no solo por parte de la prensa especializada, sino tambi‚n del público y de algunos músicos. Se los atacaba por ser gays en obvia referencia a la homosexualidad de Federico. El era el l¡der, el que ten¡a m s exposicion, al que le hac¡an m s entrevistas y el que aparec¡a m s en la tele. Su imagen sexualizada pasó a ser la de la banda completa. Ojos delineados, hombreras, pantalones a cuadros, remeras ajustadas cortas, bien a la cintura, de terciopelo de cuadriculado blanco y negr0. Muy a lo David Bowie circa Let's Dance, el Bowie siempre ambiguo y jugueton con su sexualidad que ahora, adem s, se entregaba de lleno al pop bailable.

Famosa es la an‚cdota del festival Rock in Bali de 1987: antes de que Virus subiera al escenario Luca Prodan al terminar de tocar grito: "Ahora viene la banda de los pvtos". O el festival Prima Rock en la primavera de 1981 donde les tiraron con piedras y botellas. Los insultos y las escupidas eran frecuentes en los recitales de la banda. "Yo he estado con ellos en shows de la ‚poca en los que les han tirado naranjas y entonces Federico las agarraba y hac¡a jueguitos, se les cagaba de risa. Cuando estaba con ellos dec¡amos 'ladran Sancho', es decir les jod¡a pero les pasaba algo. Si a vos te jode la envidia del otro, te jode la tuya. Les gritaban pvtos y nosotros pens bamos y dec¡amos ¿qu‚ les pasa con el puto que tienen adentro? H ganse cargo", cuenta Alejandro Jalil, diseñador de la Marca New Order y amigo personal de los Moura. Quiz  el rechazo ten¡a que ver tambi‚n con eso ¿qu‚ provocar¡a un hombre elegantemente hermoso y gay como Federico en la masa machistoide del rock local?

Si bien Federico nunca hablo de su sexualidad algunos temas generaron una especie de contraseña con el ambiente gay. "Pronta Entrega" (del disco Locura, 1985) embellec¡a de una manera única el levante callejero: "Recordando tu expresion/ vuelvo a desear/ esas noches de calor/ llenas de ansiedad/ Sofocado por el sueño y la presion/ busco un cuerpo para amar". Recordemos que en los primeros '80 el sexo en lugares públicos (baños, cines x, etc.) formaba parte de la cotidianidad del ser hombre gay y a su vez plasmaba una resistencia subterr nea a la opresion brutal que se padec¡a. "Sin disfraz" (tambi‚n de Locura) es la oda a la salida del closet a orillas del mar "A veces voy donde reina el mar/ es mi lugar llego sin disfraz/ por un minuto abandono el frac/ y me descubro en lo espiritual para amar.../ en taxi voy hotel Savoy y bailamos". Estas letras, entre otras, perduran como guiños encantadores que forman parte de la historia. Como la tapa de Superficies de Placer, que con un diseño pop muy al estilo de la ‚poca, de colores estridentes, presenta tambi‚n la imagen (dibujada) de un ambiguo cvlo azul y por debajo se imprime el sugerente t¡tulo, toda una provocacion. "Virus ten¡a eso, como una doble vida, y me parece que era muy dif¡cil en los '80 reconocerse como gay, m s all  de que estaba todo claro, adem s de introducir en una cancion t‚rminos como taxi boy: fueron los primeros que hablaron de eso, los primeros en nombrarlo. Virus mostraba algo pero por debajo intentaba decir otro tipo de cosas e ir mucho m s all ", agrega Oscar Jalil.

En una entrevista con Clar¡n en 1985 Federico se preguntaba: "¿Qu‚ es el gay rock? ¿Bowie? ¿Presley? ¿Jagger? Me parecen muy valiosos los movimientos de lucha con gente que se decide a defender los derechos de sectores aislados por necesidad. Pero Virus no hace una cosa lineal. No hay cotos porque a m¡ me interesa en la vida la integracion. Jam s entrar¡a en los campos del aislamiento, porque pretendo que nadie tenga que decir: 'este es mi lado bueno, este es mi lado malo'".
Una familia muy normal

Federico era el cuarto de un grupo de seis hermanos. Hijos de una familia platense de buena posicion economica, su padre, Pico Moura, era un reconocido abogado; su madre, Velia Oliva, maestra y pianista aficionada. Todos los hermanos varones, incluido Federico, eran futboleros, hinchas de Estudiantes de La Plata y jugaban al rugby en el tradicional La Plata Rugby Club. Federico Moura formo su primera banda en la adolescencia: se llamo Dulcemenbriyo y arranco en 1967. La ciudad de La Plata a fines de los '60 era un epicentro cultural y art¡stico, de arte joven, de gente joven. Una ciudad con algo que poco a poco se iba transformando en una tradicion y que con el tiempo algunos catalogar¡an como movimiento. Era y es una ciudad con escuelas de arte, una ciudad universitaria con gente de todas partes del pa¡s y el intercambio era incre¡ble. La música era el camino adoptado por cientos de jovenes. Y cientos de bandas iban a crear un sello caracter¡stico citadino que iba a hacer explosion con Virus. Se empezaban a formar grupos art¡sticos cada vez m s complejos en los que no solo se trataba de hacer música.

Fiel a esta tradicion Federico iba a construir su imagen y la de la banda atendiendo a todos los detalles, como una especie de vision "del todo" a lo Bowie, que armaba un concepto visual est‚tico e ideologico que iba m s all  de la música. Pero antes, y una vez disuelto ese primer grupo de juventud, viajo por Europa, Nueva York y Brasil (pa¡s que le encantaba y al cual siempre volver¡a) all¡ empezo a absorber nuevas ideas, nuevos sonidos, todo un bombardeo que lo marcar¡a en su camino art¡stico. Se instalo en Buenos Aires y abrio su primer local de ropa, llamado Limbo, donde diseñaba indumentaria. En 1977 volvio a viajar por el mundo y se instalo otra vez en R¡o de Janeiro. De regreso fundo su segundo local, Mambo. Al mismo tiempo, formo otro grupo, Las Violetas. Estaba instalado en Capital, y solamente volv¡a a La Plata por el grupo. Al vivir en Capital ese chico fino y elegante conquisto en seguida a ese mundo de "locos del tomate" que era el under porteño: Renata Schussheim, quien lo har¡a participar de sus performances, Jean Fran‡ois Casanova, quien actuar¡a en sus primeros shows, y llorenzo Quinteros, que dirigio los videos Loco Coco y Soy moderno, no fumo.

En esa misma ‚poca, pleno 1977, su hermano Jorge, militante pol¡tico, fue secuestrado y se encuentra desaparecido. Los Moura nunca hablaron públicamente sobre su hermano mayor y la noticia se dio a conocer poco tiempo despu‚s de la muerte de Federico.
La ciudad cuadrada

Todo ese movimiento cultural que hab¡a florecido en la ciudad de las diagonales fue serruchado por la dictadura. De la noche a la mañana todo quedo en la nada. "Eran tiempos nefastos de razzias en bares y boliches, tiroteos en las calles, muerte, paranoia. Viv¡amos todo el tiempo en cana. Cada dos por tres te encontrabas con una situacion de corte de pelo en la calle o m s violentas. Te pegaban, te met¡an constantemente preso, habremos lavado muchas comisar¡as", cuenta Pablo Tapia, actual cantante de 1000 Watts y voz l¡der de Marabunta, banda que se fusionar¡a con Las Violetas y dar¡a como resultado a Virus. Continúa: "Entre razzia y razzia te fumabas unos porros y todos vivimos la persecucion en Falcon y cuando se met¡an en tu casa diez monos todos encapuchados y cabeza contra el piso buscando hermanos, amigos, parientes. Fue una ‚poca muy densa con mucha muerte. Y de pendejos, muchos pendejos de entre 17 y 25, 30 años". Los homosexuales de entonces ve¡an cercenado cualquier intento de reivindicacion o visibilidad. La solucion era el exilio o en el caso de los m s arriesgados los encuentros sexuales en lugares públicos. Quiz s ‚ste sea el macabro marco desde donde poder decir que m s all  de la diversion y el baile Federico Moura representa, con el tiempo, una imagen de valent¡a al ponerse frente a un microfono, visti‚ndose como se vest¡a y cantando lo que cantaba. Dentro de la mal juzgada simpleza de sus letras era evidente una manera de ser que estaba ah¡ para el que la quisiera ver. Todo esto en un contexto que casi obligaba a la exclusion.
"De todo nos salvar  este amor hasta del mal que haya en el placer."

Wadu wadu fue el primer LP de la banda en 1981. Y la historia cambio. Aparecieron estos pibes con el pelo corto, pantalones ajustados y camisas de leopardo (toda una imagen revolucionaria) haciendo temas de dos minutos promedio. Lo seguir¡an Recrudece de 1982, en medio de ese "empujoncito" que la prohibicion de la música en ingl‚s durante la guerra de Malvinas le dio al rock. El tema emblem tico era "El banquete" "Nos han invitado/ a un gran banquete.../ ...Han sacrificado jovenes terneros/ para preparar una cena oficial,/ se ha autorizado un monton de dinero/ pero prometen un menú magistral". Agujero interior (1983) fue el primer disco masivo de la banda y llego con el fin de la dictadura. Despu‚s siguio el ‚xito con Relax (1984) con sonidos m s tecno. Y la consagracion fue Locura, de 1985.

No solo en el rock and roll la historia empezaba a cambiar. Comenzaron los primeros pasos en el camino de la visibilidad; aparecio la coordinadora de grupos gay en 1983 y los primeros boliches. Pero la polic¡a segu¡a con las razzias llev ndose a todo el mundo preso. La mentalidad opresiva no hab¡a cambiado.

Para grabar Superficies de Placer en 1987 Virus viajo a R¡o de Janeiro con familiares y amigos. All¡ Federico sufrio una extraña neumon¡a que lo debilito al extremo de dejarlo en cama durante dos semanas. Ante la insistencia de Marcelo, su hermano, y de su madre que hab¡a viajado hasta all¡ para pasar unas vacaciones con sus hijos, Federico fue al m‚dico. Le aconsejaron hacerse un an lisis de sida, una enfermedad descubierta hac¡a poco.

El resultado de aquel VIH dio positivo. Eran tiempos de discriminacion violenta, tiempos de "plaga divina", de "peste rosa". La informacion que se manejaba en Argentina sobre la enfermedad era pr cticamente nula. Los homosexuales eran señalados como los principales propagadores del virus. Era la chatura mental producto del desconocimiento y de años de una formacion basada en la represion, la Iglesia, la incomunicacion y el temor al otro. Y la homofobia que segu¡a estable sin importar cu l fuera el gobierno. Quiz  por esto (quiz  no) muchos periodistas que sab¡an que Federico ten¡a sida firmaron una especie de pacto de silencio, debido al esc ndalo que eso generar¡a en los medios. Pero alguien no cumplio, alguien quebro una promesa y la noticia corrio por todas las agencias del pa¡s.

Federico Moura murio de un paro cardiorrespiratorio el 21 de diciembre de 1988 en su casa de San Telmo. Su madre lo acompaño en su agon¡a.

Pese a lo que podemos imaginar, Federico quiso terminar su último disco con Virus en medio de un clima de desolacion y de histeria reprimida por parte de sus familiares y amigos. Pablo Tapia recuerda esos momentos: "El se fue, se fueron a grabar Superficies de Placer si mal no recuerdo a R¡o. Yo soy arquitecto y me dijo: 'Me voy por tres meses'. La idea era que le arreglara un departamento que se hab¡a comprado. Pero para m¡ ‚l algo sab¡a. A m¡ me tiro un centro al despedirse, viste esas cosas como que 'por última vez' o una cosa as¡. Pero igual quer¡a arreglar el departamento y se lo arregl‚ y mientras tanto habl bamos por tel‚fono. A los tres meses volvieron con el disco bajo el brazo a punto de editarse, y un d¡a caminando por la calle eligiendo alfombras me lo dijo. Me lo dijo como quien dice 'me compr‚ una bicicleta'.

"-Tengo sida.

"-¿Como? -dije yo.

"A su vez el tema del sida era nuevo", continúa. "Cada cosa en Virus es un cacho de historia. Y reci‚n entonces se empezo a hablar del tema del AZT y otras cosas. Despu‚s vivio un año en ese departamento que yo le arregl‚, y luego fallecio. Fue una cosa muy fuerte y triste para todos."

Pero lejos de ser sepultada con Federico la historia de Virus continúa fuerte hasta nuestros d¡as. Con Marcelo como cantante (fue una insistencia de Federico) han grabado muchos discos m s. No, este no es el final de la pel¡cula; no, la historia no termina aqu¡. Muchos homenajes, tributos y reivindicaciones por parte de bandas actuales hablan de la importancia que tiene para la música actual el rock de Virus. Pero todav¡a hay muchas cosas de la banda y de sus inicios que hay que entender, rescatar y valorar. Todav¡a cuesta que se hable, no solo de la homosexualidad de Federico, sino del valor simbolico e historico que tiene un gay como l¡der de una banda en los primeros '80. Muchos fans de Virus. Muchos de los que reivindican la banda ahora -tanto público como bandas- y muchos historiadores del rock nacional insisten en que lo que importa es la música y el legado art¡stico, que Federico pod¡a hacer lo que quisiera con su sexualidad ya que lo que trasciende es el arte. De eso no cabe duda. Pero es una mirada parcial, y que delata cierto prejuicio. Como si todav¡a hubiera un poco de miedo a reconocerse seguidor de "una banda gay". Pero sucede que esta historia no es solo rock and roll. Es mucho, mucho m s.
 
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